sábado, 30 de mayo de 2015

El Papa beatificó a Oscar Arnulfo Romero, el mártir de El Salvador

24 de mayo de 2015  - diario Tiempo Argentino


En un acto multitudinario en el que se llamó a la "reconciliación" del pueblo y convocó a más de 300 mil personas

El sacerdote tuvo su reconocimiento a 35 años de su asesinato a manos de militares, en 1980, hecho que dio comienzo a una guerra civil que duró 12 años. La ceremonia fue presidida por el delegado personal de Francisco.

A 35 años de su asesinato a manos de los militares salvadoreños, y tras un proceso eclesiástico dilatado por cuestiones políticas y presiones de los sectores más conservadores de la Iglesia Católica, el arzobispo de San Salvador, Oscar Arnulfo Romero, fue beatificado ayer en una multitudinaria ceremonia en la plaza Salvador del Mundo, en una misa presidida por el cardenal italiano Angelo Amato, delegado personal del papa Francisco, quien en febrero de este año dio el impulso final para la beatificación al reconocer oficialmente el martirio.
"La figura de Romero continúa viva y dando consuelo a los marginados de la tierra", dijo Amato en su homilía entre aplausos y vítores a Romero.

El Papa argentino envió una carta al arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, en la que califica a Romero como "siervo de Dios" y "padre de los pobres", a la vez que llamó a la reconciliación en El Salvador. El asesinato de Romero, perpetrado el 24 de marzo de 1980, desencadenó una guerra civil que se extendió hasta 1992. La ceremonia oficial de beatificación del primer beato salvadoreño, que fue presenciada por más de 300.000 personas, no tiene precedentes en esta nación centroamericana. 

El Salvador estuvo representado en la especial misa por los presidentes de los órganos de Estado, encabezados por el presidente de la República, Salvador Sánchez Cerén, uno de los principales dirigentes de Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que nació como organización insurgente para enfrentar a los sectores militares y a los terratenientes, nucleados en la derechista Alianza República Nacionalista (Arena).
Llamó la atención la presencia en la ceremonia de beatificación del alcalde de la ciudad de Santa Tecla, Roberto d'Aubuisson, hijo del militar ultraderechista a quien se acusa de haber dado la orden de asesinar a Romero.

También se destaca el pronunciamiento sobre la beatificación de Romero de Barack Obama, presidente de los Estados Unidos, país que participó activamente en el conflicto interno salvadoreño, con asesoramiento militar y respaldo económico para el gobierno militar, para "impedir el avance del comunismo", que en su evaluación representaba la insurgencia del FMLN.
"Hoy me uno a la gente de El Salvador y de todo el mundo para recibir con regocijo la beatificación del arzobispo Oscar Romero", dijo el mandatario estadounidense en un comunicado.

Por su parte, el monseñor italiano Vicenzo Paglia, al leer su biografía en la plaza ante los miles de salvadoreños expresó que "Romero fue un ejemplo de pastor que defendió a los pobres". "Romero sigue hablando y pidiendo nuestra conversión. Hoy continúa la misa que interrumpieron el día de su muerte", afirmó.
La Conferencia Episcopal salvadoreña señaló en un comunicado: "el mundo entero tiene sus ojos puestos en El Salvador y vibra de emoción por la inminente beatificación de monseñor a quien los obispos de El Salvador hemos descrito como hombre de Dios, hombre de Iglesia y defensor de los pobres".
Miles de personas siguieron la ceremonia de beatificación desde la plaza El Salvador del Mundo y sus alrededores, según se observa en las imágenes que trasmitió en directo el canal regional Telesur. Algunos se quedaron desde la peregrinación y vigilia realizada el viernes con motivo de espera y júbilo por el nombramiento a beato a monseñor Romero, señala por otra parte un despacho de la agencia dpa.

Luego de muchas dilaciones, el pasado 9 de enero la Congregación para las Causas de los Santos reconoció por unanimidad que monseñor Romero fue asesinado por "odio a la fe" cuando celebraba una misa el 24 de marzo 1980.
Poco después, el 3 de febrero, el Papa Francisco firmó el decreto que reconoce el martirio del obispo salvadoreño, y el 11 de marzo, Monseñor Vincenzo Paglia, Postulador de canonización de Monseñor Romero, visitó El Salvador y anunció oficialmente la fecha designada por el sumo pontífice para la beatificación.

De acuerdo a la Policía Nacional Civil (PNC), unos 2.000 agentes y 45.000 socorristas voluntarios resguardaron la seguridad de la ceremonia de beatificación de Romero. La ceremonia contó con la presencia de 1.200 sacerdotes y cinco cardenales, y 200 obispos, extranjeros.  «

"Un día de fiesta para la nación salvadoreña"
"Monseñor Romero, que construyó la paz con la fuerza del amor, dio testimonio de la fe con su vida entregada hasta el extremo", aseguró el Papa Francisco en una carta que envió ayer al arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, en ocasión de la beatificación de monseñor Oscar Arnulfo Romero, asesinado en 1980.
El pontífice califica al flamante beato como "siervo de Dios" y "padre de los pobres", a la vez que llamó a la reconciliación en El Salvador, teniendo en cuenta que el asesinato de Romero, perpetrado el 24 de marzo de 1980, desencadenó una guerra civil que se extendió hasta 1992.
"Es momento favorable para una verdadera y propia reconciliación nacional ante los desafíos que hoy se afrontan", dijo el Papa argentino.
"En este día de fiesta para la nación salvadoreña, y también para los países hermanos latinoamericanos, damos gracias a Dios porque concedió al obispo mártir (Romero) la capacidad de ver y oír el sufrimiento de su pueblo", apunta Francisco en la misiva.
Romero fue asesinado cuando en misa consagraba el vino en el altar, momento clave para el rito católico, por un francotirador contratado por escuadrones de la muerte derechistas. 
El día previo, en su homilía dominical, había implorado a los militares: "En nombre de Dios y de este sufrido pueblo les ruego, les suplico, les ordeno, en nombre de Dios, cese la represión."

No hay comentarios:

Publicar un comentario